Hace ya más de siete meses que llegaron al mercado los Samsung Galaxy A 2017, terminales que como sabemos destacan por ofrecer un acabado premium, unas especificaciones propias de la gama media y gama alta (según versión) y por disfrutar de un ciclo de actualizaciones comparable al de la gama Galaxy S.
Todos los Samsung Galaxy A 2017 llegaron al mercado con Android M como sistema operativo, una versión que mantienen como la última disponible a pesar de que Android N lleva ya casi un año en el mercado. La firma surcoreana todavía no ha lanzado una versión de ese nuevo sistema operativo para dichos terminales, y al paso que va es posible que no la veamos hasta finales de año.
Sabemos que más vale tarde que nunca, pero esto es un problema que está rozando el absurdo. Para cuando llegue Android N a dichos terminales puede que Google ya haya liberado Android O, un sistema operativo que estará disponible para los Galaxy S8 y Galaxy Note 8, así como para los Galaxy S7 y Galaxy Note Fan Edition, pero que podría no llegar a los Samsung Galaxy A 2017.
Esto no hace más que confirmar la realidad que se vive actualmente en el ecosistema Android. La mayoría de los fabricantes lanzan las actualizaciones tarde y en muchos casos se limitan casi por completo a cubrir a sus topes de gama, lo que deja a los usuarios de modelos de gama media e incluso de gama alta con una actualización en dos años.
No hay duda de que esta obsolescencia programada a través del software no hace ningún bien a los usuarios, que se acaban encontrando con que tienen un terminal muy potente y perfectamente funcional que supera a los modelos de gama media que han llegado al mercado dos años después, pero que sin embargo tiene una versión de Android que está dos o tres años por detrás de la actual.
Todos los Samsung Galaxy A 2017 llegaron al mercado con Android M como sistema operativo, una versión que mantienen como la última disponible a pesar de que Android N lleva ya casi un año en el mercado. La firma surcoreana todavía no ha lanzado una versión de ese nuevo sistema operativo para dichos terminales, y al paso que va es posible que no la veamos hasta finales de año.
Sabemos que más vale tarde que nunca, pero esto es un problema que está rozando el absurdo. Para cuando llegue Android N a dichos terminales puede que Google ya haya liberado Android O, un sistema operativo que estará disponible para los Galaxy S8 y Galaxy Note 8, así como para los Galaxy S7 y Galaxy Note Fan Edition, pero que podría no llegar a los Samsung Galaxy A 2017.
Esto no hace más que confirmar la realidad que se vive actualmente en el ecosistema Android. La mayoría de los fabricantes lanzan las actualizaciones tarde y en muchos casos se limitan casi por completo a cubrir a sus topes de gama, lo que deja a los usuarios de modelos de gama media e incluso de gama alta con una actualización en dos años.
No hay duda de que esta obsolescencia programada a través del software no hace ningún bien a los usuarios, que se acaban encontrando con que tienen un terminal muy potente y perfectamente funcional que supera a los modelos de gama media que han llegado al mercado dos años después, pero que sin embargo tiene una versión de Android que está dos o tres años por detrás de la actual.
Eso es todo por el momento
Información sacada de taringa.net
Saludos!
Ecmotion....
No hay comentarios.:
Publicar un comentario